CÓRDOBA (Corresponsalía) La diputada nacional del PRO por Córdoba Laura Rodríguez Machado se sumó al lote de aspirantes de Juntos por el Cambio (JxC) a la gobernación de la provincia. Su voluntad de dar pelea coronó la segunda convención nacional de Liberales Juntos, espacio donde se encolumnan distintos socios de la alianza opositora, nominalmente identificados en el espectro liberal. Dicho encuentro, del que participaron dirigentes locales y nacionales como Ricardo López Murphy (Republicanos Unidos) y Luis Rosales (Avanza Libertad, de José Luis Espert), resultó una demostración de fuerzas del sector cambiemista, con fuerte impronta amarilla, que tiene a Patricia Bullrich como máxima referencia.

De hecho, la nominación de la exsenadora nacional fue impulsada por la propia exministra de Seguridad, quien además ha abonado vínculos con el actual senador Luis Juez, quien ya avisó que sí o sí será candidato en 2023. Aún con la bendición de “Pato” y el beneplácito de otros nombres amarillos de referencia en Córdoba, Rodríguez Machado sabe que ocupa un lugar en la grilla junto a nombres como el citado Juez y su correligionario Gustavo Santos, a quien todos sindican como el preferido del expresidente Mauricio Macri y que ahora ve cómo le crece la competencia en su propio partido.

“Me parece legítimo que varios quieran ser candidatos. También es legítimo que una mujer lo sea. Hay tres discusiones que tenemos que dar. La primera es quiénes. La segunda es qué propuestas tiene cada uno. La tercera es cómo cada uno pretende que su propuesta se concrete”, analiza.

Vicepresidenta segunda del PRO, exdirigente de la Unión de Centro Democrático (UCeDé) y funcionaria municipal durante la intendencia de Germán Kammerath en las secretarías de Desarrollo Económico y de Economía, Rodríguez Machado asegura que nunca abandonó “las políticas centristas, liberales y republicanas”.

“Siempre he defendido los principios de la libertad. Cada vez que he tenido representatividad política me he manifestado a favor de estas ideas. Incluso cuando tuve actividades en el Ejecutivo, mi trabajo ha sido en favor de la defensa de la iniciativa privada, del sector productivo, de achicar los costos del Estado”, dice a Letra P.

Sobre la selección de postulantes en JxC, y ante la inexistencia de una ley de primarias en los comicios provinciales, la legisladora apuesta a un acuerdo: “Un mecanismo claro, transparente y acordado por todos los partidos. Puede ser una interna abierta. Las alternativas están en discusión, a la espera de un consenso”, afirma.

Dicho mecanismo, cree, permitirá evitar el “dedazo” desde Buenos Aires, opción que en muchos sectores aún consideran viable. “Sí o sí hay que hacer un reglamento de internas, aunque luego no se utilice. Si no tenemos el corset de un mecanismo claro, hay riesgo real, como ya pasó, que haya varios candidatos, dividir los votos y que terminen ganando otras fuerzas”, señala, con el recuerdo fresco de las elecciones de 2019, en las que la división opositora facilitó el triunfo del cordobesismo.

“Es muy difícil el dedazo esta vez porque ahora los presidentes de los partidos no tienen esa posibilidad absoluta de dirigir a Juntos por el Cambio. Pueden tener influencia sobre sus propios partidos, pero no sobre todo el espectro del frente. De hecho, no existió dedazo para las internas de diputados nacionales”, amplía. La referencia no es casual. La abogada fue electa diputada nacional como integrante de la lista que elevó al dúo de Juez y Rodrigo de Loredo como mojón ineludible de cara a 2023. La lista rival en la interna partidaria, liderada por Mario Negri y Santos, contaba con el aval del mismísimo Macri.

En su entorno circula un dato estadístico que los envalentona: distintas mediciones le asignan una intención de voto superior a la de otras figuras que pretenden competir por las precandidaturas. “Sumamos más que varios. Más que Santos y unos cuantos”, enfatizan.

Peronismo huérfano

La posibilidad de un acuerdo entre la alianza opositora y el actual gobernador, Juan Schiaretti, sigue siendo una de las hipótesis más aireadas en los corrillos mediterráneos. Rodríguez Machado la niega, formalmente, sin desconocer “acuerdos programáticos”.

“Nunca hubo una alianza. Siempre fuimos con nuestros propios candidatos y competimos. Así les ganamos elecciones. En el gobierno del presidente Macri, afrontamos una debilidad que era no tener mayoría en las Cámaras. En ese sentido, nos apoyamos en algunos dirigentes de la oposición, también con muchos gobernadores que compartían nuestra política. Entre ellos, está Schiaretti”, explica.

En consecuencia, afirma que tampoco habrá pacto para el futuro. Por el contrario, cree que JxC cuenta con una gran chance de triunfo en 2023: “Schiaretti no va a estar más. Tampoco estará De la Sota. Hay un peronismo huérfano. No vamos a confrontar con un gobernador que haya tenido una fuerte imagen positiva”. Aún así, en sintonía con lo expresado por otros referentes de la versión local de la alianza, la dirigente coincide con la necesidad de dar continuidad a algunas políticas impulsadas durante los 24 años de gestión de Hacemos por Córdoba.

“Hay cosas que hay que dejar. Es madurez política: cuando un gobierno al que vos sucedés tiene una buena gestión, no la vas a patear por el solo hecho de que lo haya hecho otro. Juntos por el Cambio no tiene esa mirada sobre las gestiones anteriores: si hay algo positivo, hay que dejarlo, y mejorar lo que se pueda”, afirma.Diferencial

Rodríguez Machado reconoce su condición de mujer como un diferencial en una provincia conservadora y aún tabicada por conceptos machistas. Sin militancia expresa en cuestiones de género, vivió hostigamientos por su postura favorable a la ley de interrupción voluntaria del embarazo en diciembre de 2020. “Una mujer con coraje puede conducir. Yo he tenido cargos ejecutivos importantes, no estoy debutando en la gestión. Creo que también es un plus”, razona.

Entre los antecedentes de mujeres con coraje no duda en citar dos nombres caros al espacio que integra. Primero, Bullrich, a quien no solo reconoce como referente. Según las encuestas que menciona, la exministra es también una de las dirigentes de JxC que mejor mide en Córdoba.

Su otra referencia es la exgobernadora bonaerense María Eugenia Vidal. “Les ganó una elección a los barones del conurbano. Eso demuestra que no hay imposibles. La sociedad nos ve a las mujeres más ordenadas, más prolijas, menos propensas a la rosca. Esas cosas nos generan un plus”, sentencia.

Publicado en Letra P

Redacción Electoral