La renuncia de Máximo Kirchner como jefe de bloque de diputados disparó el pesimismo en el entorno presidencial sobre el futuro del Frente de Todos y la unidad de cara a 2023.

En el albertismo se quejan de que al presidente no lo respetan en su propio frente y que no pueden estar a una carta de Cristina Kirchner de romper.

Santiago Alzaria on Twitter: “Siempre hacen lo mismo, hacen que se pelean pero después se juntan de nuevo. A ver si alguna vez se avivan, #GeniosDelVoto #GobiernoDeLaMentira Jonatan Viale, sobre la posible ruptura del Frente de Todos: “Siempre se pelean, pero terminan juntos” https://t.co/gbnDWSru4B / Twitter”

Siempre hacen lo mismo, hacen que se pelean pero después se juntan de nuevo. A ver si alguna vez se avivan, #GeniosDelVoto #GobiernoDeLaMentira Jonatan Viale, sobre la posible ruptura del Frente de Todos: “Siempre se pelean, pero terminan juntos” https://t.co/gbnDWSru4B

“Si es con Todos, no es justo que ellos pueden renunciar cuando no les gusta algo y después seguir como si nada”, se quejan en el ala del presidente. “Alberto Fernández es el administrador del consorcio de un edificio en el que no es propietario de ningún departamento”, dijo un funcionario del albertismo puro.

Esta fragilidad creen que se acentuará luego de junio, cuando ya falten seis meses para la apertura del calendario electoral de 2023.

El propio Alberto habló de abrir unas primarias para definir al candidato oficialista el año que viene y el kirchnerismo está dispuesto a presentar uno o dos candidatos. Pero entre los colaboradores de Alberto creen que no sólo es una “locura” que un presidente en ejercicio compita contra su propio frente, un hecho inédito en el mundo, sino que si hay riesgo de perder, no se presentará. Por eso creen que la idea de una PASO es una estrategia de Alberto para tener contenidos a los socios del kirchnerismo.

Publicado en Agencia Nova

Redacción Electoral